Experiencia 09/11/2017

Como de costumbre me despierto y decido levantarme e ir al baño
Son las 7:00 y aprovecho para intentar dormir el cuerpo y salir al astral. En una media hora cambio de técnica al no estar consiguiendo las vibraciones y me imagino flotando y después cayendo, aquí sí consigo las sensaciones y comienzo a disfrutarlas, sé que ya estoy en el trance necesario y cuando estoy convencido intento la proyección.
Me pongo en pie y es tan real que al principio dudo si estoy despierto. Estoy dormido consciente pero tampoco me he proyectado, me doy cuenta que estoy en un sueño lúcido porque no estoy en mi habitación. Me entran las prisas para hacer cosas y no salir del sueño e intento anclarme a la experiencia mirando todo con detenimiento. Salgo de la habitación donde me encontraba y resulta que estoy en casa de mi madre, en el salón, puede que sea la décima vez que me encuentro en este escenario. Son muchas las veces donde sueño normal y lúcido que estoy en esta casa, casi más que en mi propia casa. Me concentro en mi cuerpo para volver ya que no busco, como he indicado en mi libro, los sueños lúcidos, busco proyecciones. Enseguida que lo medito me concentro en volver a mi cuerpo y enseguida ya me percibo tumbado en mi cama. Vuelvo a concentrarme en salir proyectado y vuelvo a hacerme lúcido pero en un sueño de nuevo. Lo que viene después ya es personal y además se funde poco a poco en un sueño, como había vuelto a fallar en proyectarme pues simplemente aprovecho el sueño y me divierto.